Capítulo 58- Adiós Dulce Hawaii.
Narra Dani.
Cuando bajamos a desayunar Edu nos lanzó mas de una indirecta el muy cabrón.
- ¿Qué te pasa Daniel se te ve cansado?
- ¿A mí? Que va estoy estupendamente-me puse ha hacer estiramientos-.
- Para tonto-dijo Maya haciendome parar-.
- Solo si me das un beso.
- Iros a un hotel.
- Luego somos nosotros eh mi amor.
- Iros un ratico a la mierda y dejadnos disfrutar de nuestro amor-dije antes de besar a Maya-.
Edu y Fer se lanzaron a por mí y yo estube unos segundos mas pegado a los labios de Maya hasta que estaban demasiado cerca y salí huyendo hasta esconderme en el gimnasio.
- Dani tenemos a Maya. Sal o ella sufrirá las consecuencias.
- Dani no salgas-la oí gritar-.
Eso era demasiado asi que salí de mi escondite y no la ví pero a esos dos sí. Se tumbaron encima de mí aplastandome.
- Novia traidora.
- Es que si no se llevaban a nuestro hijo.
- Por cierto hay que sacarlo.
- Si en cuanto se te quiten de encima y desayunes-dijo dandole un bocado a su tostada y volviendo con las chicas-.
Narra Maya.
Volví a la cocina con esas dos que estaban hablando de temas guarretes.
- Martina anoche os escuchamos y ¿tu crees que esas eran horas?
Me acomodé en mi taburete que estaba al lado de Clara y me apollé en la encimera a ver si pillaba algo de lo que decían.
- ¿Qué hicisteis Martinucha?
- Tu tampoco hables que me distes miedo cuando te llamé ayer.
- Ayer....ayer...-hize como que me lo pensaba-. No me acuerdo.
- ¿Y de anoche tampoco te acuerdas?
- Ay tengo alzheimer¿era algo con chocolate?-dije levantandome y abriendo la nevera para coger un zumo, después me subí en la encimera a bebermelo-.
- Si y con romper las camas de mi casa. Hija mía que se escuchaba hasta en la playa de enfrente los muelles de la cama.
- Ay no seaís exageradas.
- ¿Ves? Lo acabas de admitir.
- Agg siempre pasa lo mismo en estas conversaciones.
- Ya pero Clarita siempre se queda callada.
- Yo no tengo nada que decir.
- ¿Entonces vosotros no...?
- Esos son temas personales.
- Venga Clara ni que estubieran escuchando detrás de la puerta.
En ese momento abro la puerta para que lo compruebe y caen los tres de golpe. Las tres nos miramos con la boca abierta. Joder que oportuna soy siempre.
- ¿Ves Clara como si que eran ellos?-dijo Edu haciendose el gracioso-.
- Lo mato.
Salí corriendo detrás de él y me enganché en su espalda y le dí varios puñetazos en la cabeza. Después era el turno de Fer con el hize lo mismo. Pero cuando me giré para Dani no pude hacerle nada. Es tan...tan... el.
- ¿Paseamos a nuestro hijo?
- ¿Has desayunado?
- Si te dejas comer a besos.
- Claro que me dejo.
- Pues entonces-se acercó a mí-.
- ¿Entonces?
- Te robo la tostada-salió corriendo hasta el salón y los demás se descojonaban-.
- Eh rubio eso es trampa.
- Yo creo que no-dijo dandole un bocado a mi tostada-. Tomatelo como una venganza.
- Voy arriba a vestirme. Que te aproveche mi tostada.
Abrí la puerta de la habitación y Viral me rodeó moviendo el rabo. Después de eso bajó las escaleras de golpe para saludar a los otros. Yo abrí el armario y me puse a hacer la maleta con toda la ropa sucia y la que no me iba a poner e hize lo mismo con la de Dani. Cuando entró en la habitación dió la casualidad de que me quitaba la camiseta del pijama de espaldas a el.
- Como hagas eso delante de mí no soy consiente de mis actos-dijo abranzandome por detrás-.
- Dios que susto me has dado-dije llevandome la mano al corazón-.
- No te voy a dejar que te vistas.
- ¿Sabes que los chicos nos han pillado?
- Ellos me dan igual.
Estaba a punto de besarme y Viral le ladró.
- A Viral parece que no le da igual. Venga vistete y dejame vestir.
- Pues metete en el baño porque te miraré.
- Tonto-dije entrando en el baño y medio cerrando la puerta-.
Me quité la camiseta del pijama y me abroché el sujetador,mientras hacía esto estaba tan tranquila hasta que miró por la rendija de la puerta para comprobar si Dani se vestía. Para mi sorpresa el estaba escondido detrás de la puerta.
- Dani.
- Oye tu también me ibas a espiar.
Cerré la puerta y me vestí tranquila. Me puse una camiseta blanca que ponía Paris con unos shorts rosas y unas converse del mismo color y como no mi gorro que no podía faltar. Ahora iba a ser yo la malota y me puse a espiar a Dani. Joder que cuerpazo tiene. 
- ¿Te traigo un cubo?
Mierda me pilló.
- ¿Para qué voy a querer un cubo? 
- Para recoger las babas.
- Creído.
- Pero me amas mucho.
- Mucho mucho mucho-dije antes de darle un beso-.
Bajamos y estubimos hablando un rato en la cocina con los chicos. Al parecer Martina quiere hacer barbacoa en la playa, algo asi como una tradición, pero dice que por la noche. Los chicos harán la hoguera y veremos fuegos artificiales después volveremos a la casa para coger las maletas y volver a casa. Después de la charla salimos a pasear a nuestro hijo.
- Voy a hechar de menos esto.
- ¿El que? 
- Pues el tenerte a ti todos los días al despertarme,nuestros besos mañaneros,robarte el desayuno,abrazarte cada vez que me de la gana,sentirte cerca,ver una peli y no saber de que va porque me pierdo en tus ojos, que seas lo primero que veo al despertar y lo último al acostarme y por supuesto nuestras noches locas. Tengo miedo de perderte.
- No me perderás. Nunca. Lo juro.
- Te amo-me besó-.
Viral nos separó ya que tiró muy fuerte de la correa y arrastró a Dani.
- No quiere que me beses. Se pone celoso.
- Pues como sea al contrario el celoso voy a ser yo.
Volvimos a casa y me puse a ayudar a las chicas con la comida para la noche en la playa;después me fui a la habitación y en un bolso eché lo que necesitariamos Dani y yo para toda la noche. Estaba distraida y el sonido de mi móvil me hizo caer de la cama. Joder si que me había dado un buen susto. Cuando me recuperé del golpe maldecí a mi móvil y lo cogí sin mirar el nombre.
- Al habla Maya agente secreto de los Estados Unidos de América ¿A quién asesino hoy?
- Mira que eres tonta- escuché una risa que me resultaba familiar-.
- Espera ¿tu eres?
- 006. Encantado ayudante.
- Ah tu eres Rodrigo.
- ¿Ya no soy tu Rodri?
- Pues no, hace tiempo que dejastes de serlo-mi voz sonaba seca-.
- Es que no me he podido olvidar de tí y quería saber si
- ¿Que no te has olvidado de mí? Pues yo no me he olvidado de que no estubistes ni un puto día en el hospital cuando peor estaba. 
- Ah sí tu madre, por cierto como esta.
- Muerta imbécil-unas lágrimas se asomaban por mis ojos-. Al igual que tu lo estas para mí.
- Maya no hagas la idiota que te he llamado para arreglar lo nuestro.
Colgué. No quiero saber nada de eso. Dani entra en la habitación y me vé en el suelo a punto de llorar.
- Ei ¿que pasa pequeña?-dice sentandose a mi lado en el frío suelo-.
El si sabe como tratarme.
- No es nada es que Albertito ha pillado un resfriado y parece que es un poco grave ya que estan en el hospital, pero no pasa nada.
 - Vamos que tu no lloras por tonterías como esas. Sabes que puedes confiar en mí. Soy tu novio.
Mierda ¿por qué me conoce tan bien?
- Claro que lo sé. No te preocupes- le dí un beso y volví a organizar el bolso-.
- No me quedo tranquilo, pero bueno GUERRA DE COSQUILLAS.
- JAJAJAJAJA PA JAJAJJA RA JAJAJA- me solté de su agarre y salí corriendo escaleras abajo-.
Mi querido Viral le cortó el paso a Dani apareciendo por la puerta y quedandose ahí sentado.
- ¿Qué te he hecho yo a ti? Era mía antes que tuya- le sacó la lengua al perro-.
Yo me escondí detras del sofá hasta que Dani apareció. Es increíble como me cambió el humor de golpe y porrazo solo con su aparición.
- Dani JAJAJA ya JAJA por favor-le supliqué-.
- Con una condición.
- Usted dirá.
- Eh no me llames de usted que parezco viejo. A lo que iba me tienes que decir por qué estabas asi.
- Bah Dani te he dicho que daba igual. Una tontería.
- Es que parece que no confías en mí.
- Sabes de mas que eres en el que mas confío. 
- Pues dímelo.
- No.
- ¿Pero por qué?
- Porque te vas a enfadar.
- Maya dilo- estaba hablando ahora en un tono muy serio-.
- Voy con las chicas luego hablamos.
Se quedó cabizbajo y se sentó en el sofá con Viral en sus pies. Se había enfadado y eso era lo que quería evitar. Una vez en la cocina el gran oído de mis amigas hizó que me llegaran preguntas a mansalva.
- ¿Qué ha pasado?
- ¿Por qué estabais discutiendo?
- ¿Por qué se va ha enfadar? 
- Pero responde.
- Si me dejais hablar.
- Vale vale.
- Gracias. Es que me ha llamado mi ex que quiere volver conmigo yo lógicamente le he dicho que no y le he mentido a Dani porque sabía que se iba a enfadar.
- Ah pues diselo cuanto antes porque ese es un perro rabioso.
- Es muy celoso eh Maya.
- Gracias por la información-dije sarcástica-.
Salí de la cocina dispuesta ha hablar con Dani cuando escucho un portazo. Joder se ha ido. Y esta vez es por mi culpa.
Narra Dani
Iba a pasar por la cocina cuando escucho a Maya hablar con las chicas.
- Mi ex-es algo de lo que he podido escuchar-.
 Espera un momento ¿Su ex? Sabía que me había mentido. Me voy de allí dando un portazo. Maya sale a la puerta y me vé sentado en las escaleras de la casa con las manos en la cabeza. Estaba enfadado.
- ¿Te has enterado verdad?-dijo mirando al horizonte-.
- ¿De que no confías en mí? Claro.
- Dani yo no quería..
- Ni querías que me enterara. Es como si estubieses haciendo algo malo. ¿Acaso estas con el?
- ¿Qué? NO. ¿Me crees capaz de dejarte por ese imbecil?
- Puede quien sabe.
- Tu no eres el Dani que yo conozco.
- La gente cambia.
Maya entró en casa con lágrimas en los ojos. En ese momento me daba igual lo que hiciera. Un rato después nos fuimos a la playa. Las chicas no dejaban a Maya ni un solo segundo,creo que estaba dolida después de lo que dije. 
Narra Maya.
Esas palabras me dolieron. Y me dolieron mucho. No podía entender como podía pensar que podía estar con Rodrigo y con el a la vez. Este no era el Dani que yo conocía. En la playa me animé un poco más. Martina me enseñó ha hacer un poco de surf. La verdad no se me daba tan mal. Estubimos un buen rato en el agua. Mejor dicho: estube un buen rato en el agua. Martina se aburrió de mí y se fue con Fer a no se donde. En la orilla los empalagosos a lo suyo y pegado a la sombrilla ahí estaba el. Supongo que reflexionando sobre su comportamiento de un completo gilipollas.
Narra Dani
Estaba junto a la sombrilla y de repente empezó a sonar su móvil. Lo cogí sin mirar el nombre siquiera de todas formas creo que no le tenía agregado.
- Maya joder llevo toda la semana llamadote para ver si podemos arreglar lo nuestro. Vale si que es verdad que no estube ni un día en el hospital con tu madre y que tampoco sabía que había muerto ¿pero que mas dá? Además puedes dejar ya a ese novio tuyo que tan perfecto es. Total por un gilipollas menos en tu vida.
- ¿Perdona? ¿Tu quién coño te crees que eres para hablarle a MI novia en ese tonito? Si el que te habla es SU novio¿como puedes decir que no importa el tiempo que pasó con su madre en el hospital? Tu eres un gilipollas de mierda como la vuelvas a llamar te parto la cara capullo. Olvidate de ella. Tu no supistes aprovecharla y ahora es mía. Gracias por hacerle darse cuenta de que contigo no hacía nada y que esta mejor conmigo.
Colgué a punto de llorar. Joder que ella no tenía la culpa de nada. Me cago en mi maldito orgullo. Orgulloso. Dani siempre igual. Eres un mierda. Tragate tu orgullo ya de una puta vez.
- Dani-la escucho-.
Joder ¿me habrá escuchado?
- ¿Emm si?
- ¿Me pasas la toalla?-dijo tiritando-.
- Claro-le pasé la toalla y ella se sentó a mi lado-.
- ¿Qué haces con mi móvil?
Oh no tenía su móvil todavía en la mano.
- Empezó a sonar y lo cogí. Me volvía loco.
- ¿Quién era? 
- La compañía de teléfonos.
Otra vez Daniel ¿otra vez? Enserio. Tragate tu orgullo y dile lo siento, me equivoqué. Pero tu nada. Me giro. Ya no está. Las chicas la reclaman. Se ha ido hace medio minuto y ya la hecho de menos. Necesito tenerla cerca. Abrazarla,besarla y amarla. Y ahora no puedo,todo por culpa de una llamada y de mis malditos celos. Almorzamos en la playa y al parecer Maya estaba cansada y se echó un rato. Rato que aproveché para arreglar la idiotez que hice.
Narra Maya.
El surf cansa. Y cansa mucho(o que yo soy muuuuuuuuuy vaga). Me dormí un rato puede que 20 minutos o cosa así. Me despierto junto a una cartulina que pone "Mira disimuladamente detrás de ti" yo sin hacer caso hago un giro de 360 grados con mi cabeza y vuelvo a la cartulina. "DIJE DISIMULADAMENTE" me reí con eso. "¿Hechas en falta a alguien? Si es así sigue por el camino de rocas de la derecha" volví a mirar ahora algo mas disimulada. Si es cierto que echaba de menos a alguien, Dani. No lo ví y seguí las indicaciones de la cartulina. En las rocas encontré otra cartulina que decía " Parece que si me extrañas pero no tanto como yo a ti, sigue hasta el kiosco azul" Sonreí brevemente y le hice caso. En el kiosco no encontré ningún cartel pero si que ví a la mujer que dijo que Dani era muy guapo. Oh maldita mujer. Ella se acercó a mí. Yo la miré extrañada ¿Se acordaba de mí? 
- Tu eres Maya a que sí.
- Si.
- Pues toma maja de tu noviete. A ver lo que hacéis que los jóvenes de hoy sois muy mal pensados.
Le dí las gracias y me retiré de allí para leer mas tranquila el papel. Lo abrí " Ya queda menos pequeña, seguro que te has alejado de Adolfa mi gran amiga :P, ahora llega lo complicado. Tienes que adivinar desde donde te estoy observando desde que empezó esto. Pista: has pasado por ese lugar." ¿Qué? ¿Otra vez desde el principio? Me doy la vuelta pasando por los mismos lugares donde he estado: primero el kiosco después el pequeño camino de madera, la arena y el camino de rocas. Tiene que estar ahí. Si o si. Busco bien pero nada. Se me caen todas las notas recogidas y por pura casualidad las coloco del revés en el suelo. "Un mirador con vistas al infinito". Mi mirada se desvía hasta el puerto. Tiene que estar allí. Voy hacía allí a paso ligero y una vez en el puerto pregunto a un señor si lo a visto. El dice que sí y me señala donde. Voy hacía allí pero no lo veo. Lo único que puedo ver es una barca que esta enganchada en el muelle. Me fijo bien. El esta ahí con una pancanta que pone "Lo siento soy un estúpido que te ama mucho". Se me escapa una lágrima de la emoción y me lanzo a abrazarlo. No calculo bien y voy a parar en el agua. Yo tube que hacer algo muy malo en otra vida porque todo lo malo me pasa a mí. Dani me ayuda a salir del agua pobrecito lo voy a mojar al abrazarlo. Bah le beso. Pero entonces lo volveré a mojar al tocarlo. Mientras yo pienso estas tonterías Dani al ver que me quedo en mi mundo se lanza y me besa. 
- Lo siento ti no tenías la culpa y me he dado cuenta tarde.
- Ya ¿Era Rodrigo no? La llamada de teléfono digo.
- Si ¿como lo sabes?
- Dani por favor soy mujer.
- Ah lo olvidé.
- Que gracioso.
- No ya enserio.
- Pues que te escuche hablar con el. Bonita excusa.
- La que se me ocurrió en el momento. Lo siento mucho.
- No pasa nada, cuando te compre lo de ser un imbécil ya sabía que venía en el lote.
- Pues yo no he sido el que se ha caido al agua. Te quiero-pegó su frente con la mía-.
- Mi venganza será terrible-dije pasandole los brazos por el cuello y pegandolo aún mas a mi-.
- Nos separan milímetros. Besame ya ¿no? 
Sonreí y le besé dulcemente. Dimos una pequeña vuelta en la barca y volvimos con los demás.
- Edu deja mi cámara o muere.
- Eso me suena a amenaza.
- Jo con lo que mola sacar fotos.
- Hola chicos que pacíficos estais.
Me lanzaron miradas asesinas y nos miraron dudosos.
- Y vosotros parejita. Muy tranquilos estais.
- Que va solo lo hemos arreglado.
- Es que no poder besar esos labios es una condena. 
- Ay eres un cielo-le besé-.
- Si si pero la fama la tenemos nosotros.
-Tu chitón paparazzi.
Edu se hizo el ofendido. 
- Venga vagos dejaros de mimitos y que los chicos vayan a por palos para hacer el fuego.
- Nooo mi Dani se queda aqui.
Dani sonreía ampliamente mientras yo le agarraba del brazo fuertemente.
- Vale. Me pido brazo de Maya para cenar.
-Caníbal.
Dani al final se fue con los chicos y yo me tiré en la arena.
-Si quieres recuperar las horas de sol perdidas vas mal.
-Dejame a mi con mí película.
- ¿Salgo yo? 
- En esta no pero en la de miedo eres el monstruo principal.
-Que maja eres.-dijo con odio total-.
Los chicos volvieron e hicieron la hoguera. Mas tarde cenamos entre nuestras tonterías y mimitos de las parejas. A media noche cogí a Dani del brazo y lo llevé a una mini cueva que encontré cuando veníamos camino de la playa. Desde allí se veía la luna en lo mas alto y una gran zona de playa. Nos sentamos en la arena dentro de la especie de cueva.
- Es precioso.
- Tu eres mejor-apollé mi cabeza en su hombro-.
- Te amo-dijo dandome un beso en la frente-.
Al poco rato volvimos con los chicos y a las tres de la mañana nos fuimos a casa a dormir.
A la mañana siguiente me desperte porque Viral me lamía la planta del pie. 
- Bien que podías despertar tambien a tu padre-dije con los ojos aún cerrados-.
Empezé a tocar la cama con la mano y me dí cuenta de que Dani no estaba. Me levanto a regañardientes y me visto. Me pongo una camisa blanca de botones y tirantas con unos shorts vaqueros. Mi gorro blanco y mis converse. Bajo las escaleras y entro en la cocina. Pero ¿no hay nadie? Me estoy empezando a asustar.
- Chicos si esto es una broma no tiene ninguna gracia. Venga salid de detrás de la puerta-dije moviendo la puerta-.
Nada. Subo a las habitaciones. Ni rastro. Ni de ellos,ni de las maletas,ni de nada. Ellos no serían capaces de dejarme aqui sola ¿verdad? Maya fuera esos pensamientos. Habran quedado para comer sin ti. Sin mí. Seran hijos de sus madres. Llamo a Clara. Nada de nada. Martina. Sin respuesta. Fer. Fuera de cobertura. Edu. Apagado. Dani. Si por fin.
- ¿Dani donde estais? 
- En el parque de enfrente.
- ¿Y que hacéis alli? Creí que me habíais abandonado.
- Eso pretendian. Tranquila ya voy para allá.
Justo sonó el timbre. Ya estaban aqui. Pues si que andaban rápido estos chicos.
- Me habeís dejado sola nunca os lo perdonaré.
- Dani hazlo.
Dani sin rechistar se acercó a mí y me abrazó. Yo como una tonta sonreí.
- Bueno ya esta bien de mimitos mi padre nos mandará el avión dentro de media hora asi que venga a por las maletas-dijo Martina dando palmitas-. Echaré de menos Hawaii-Fer la besó en la frente-.
Cogimos las maletas y en quince minutos llegamos al aeropuerto. Estuvimos allí cosa de diez minutos y nos subimos en nuestro avión. Martina miraba por la ventana melancólica. Todos íbamos felices, pero nadie sabía que nuestras sonrisas se borrarían de la cara tan rápidamente...