Capítulo 22- A Hacer La Maleta.
*Mientras tanto en casa*
-¿ Dónde estará esta chiquilla?- decía mi padre dando vueltas por la habitación-.
-No lo sé, pero no te preocupes seguro que está bien, además está con Dani ¿no?
- Eso es lo que me preocupa.
- No pasa nada es su novio.
- Es que acaso tu no recuerdas lo que hacías a su edad con tu novio.
- AAY que mal pensado eres. Vente ya a la cama.
 Entonces entré yo por la puerta de casa. Mi padre bajó como un rayo a hacerme un interogatorio.
-¿Dónde has estado?
- En un lugar maravilloso.
- ¿Con quién?
- Con Dani, te lo dije antes.
- ¿Estabaís solos?
- Si. Me voy a la cama papi. Mañana hablamos.
Se quedó con una cara de imbécil total, estaba extrañado, yo NUNCA le decía papi. Sabía que estaba feliz; y mucho pero no porque. Me encerré en mi habitación con una sonrisa de oreja a oreja. Fue el mejor cumpleaños de mi vida
Al día siguiente tenía que hacer la maleta. Bajé a desayunar, donde me esperaba otro interrogatorio por parte de papá ya que anoche no se quedó satisfecho.
- Buenos días-dije sonriendo-.
- Hola ,se puede saber a que se debe tanta ¿felicidad?
- ¿No puedo estar feliz?
- ¿ Que te hizo Dani?-dijo poniendo su cara enfrente de la mía-.
Abrí los ojos como platos. Dios este hombre tiene un problema, pensé y me reí para mis adentros.
- Nada.
- Entonces..¿que le hicistes tu?
- Nada-dije tan natural-.
- Y entonces- Marta lo cortó, menos mal por que estaba a punto de explotar-.
- Maya después de desayunar te ayudo con la maleta.
- Si gracias, me vendría genial un poco de ayuda.
Al rato en mi habitación.
- No me creo lo que le has contado a tu padre pero no te voy hacer que me lo cuentes si no quieres.
- Es que prefiero que sea un recuerdo para nosotros dos ¿me entiendes?
- Por supuesto -sonrió-.
 - ¿Marta tienes algún bolso de mano grande?-dije cambiando el tema-.
- Creo que sí ¿para que lo quieres?
- Para llevarme mis sombreros.
- JAJJAJJA. Debí suponerlo. No te fías de dejarlos aquí.
- Noooo por supuesto que no es eso, es que si fuera por mí llevaría gorros hasta para dormir.
- Eso no lo dudo,¿qué haces con las guitarras?- dijo viendo que cogí dos de mis guitarras.
- ¿Cuál me llevo?
- No te las puedes llevar.
- Ya lo sé, las dos no pero una sí por eso quiero saber cual te gusta más.
Siempre me había gustado la música. Cuando tenía siete años tocaba el piano, más tarde con unos doce empezé a tocar la guitarra. La música me sacaba de mis problemas.En el tiempo que llevaba en Madrid la tocaba de vez en cuando, pero es lo que más me gusta del mundo.
- Preguntaselo a María que ella te a escuchado tocar las dos.
- Vale gracias Marta. Ya te puedes ir si quieres solo me falta meter unas cosas en el neceser y listo.
- Denada corazón.
Busqué a María por toda la casa cargando con las dos guitarras. Por fin la encontré en el salón jugando con Albertito.
- Marii cariño ¿que guitarra te gusta más?
- A mi me gusta más el sonido de esa-dijo señalando la guitarra acústica-.
- Gracias.
Llamaron a la puerta. ¿Quién sería?