Capítulo 42- Necesito Despejarme.
Narra Maya.
Miré fijamente a Dani a los ojos, no sé que contestar. Estoy echa un lío. Lo miré de nuevo con lágrimas en los ojos.
- No lo sé. Necesito despejarme un poco. Estar sola.
- Lo que tu digas, aquí estaré para cuando vuelvas. No tardes mucho que el buffet cierra a las tres y media.
- Tranquilo no lo haré.
Salí de la habitación. Tenía claro a donde iría. Fuí a un lugar por donde pase una noche. Allí alquilaban los caballos. Elegí uno y me alejé de la ciudad todo lo que pude. Hacía tiempo que no montaba a caballo. Siempre me ayudaba a pensar. Volví antes de las res dejé el caballo y me volví al hotel. Ya estaba algo mejor. Entré en la habitación y allí estaba. Tal y como dijo, es un hombre de palabr. Estaba tirado sobre la cama mirando al techo. Al verlo así me empezé a imaginar una vida juntos, con nuestro pequeño. Se me volvieron a liar las ideas.
-¿Mejor?
- Se puede decir que sí.
- Maya si no lo quieres tener no pasa nada. Te entiendo. Y no pasa nada porque tu y yo estaremos juntos siempre y podremos tener los que quieras. Cuando quieras-dijo mientras me cogia las manos-.
- Dani, tengo que vomitar- se levantó de un salto y me llevó hasta el baño-.
Allí me puse a vomitar. No lo pasaba nada bien y él lo sabía. Cuando terminé nos sentamos en la terraza. Mirando a la nada.
- Quiero tenerlo-dije de golpe-.
- Y yo pero-le callé con un beso y me puse encima de él-.
- No hay peros que valgan. Si ha venido, ha venido y yo soy su madre. No le puedo rechazar.
Esta vez me besó el y me acarició la cara diciendome te quiero.