lunes, 23 de diciembre de 2013

Capítulo 61- No Te Vayas
Narra Martina.
Me llamaron de una universidad de Nueva York, no sabía que iba a hacer, por una parte estaba que estaría mejor formada y todo eso pero por otra estaba mi familia y Fer. Se lo conté a mi padre, el me decía que me fuera que sería lo mejor y bla, bla, bla. Llamé a Clara para quedar, pero ella estaba enferma y no podía salir de casa así que fui a visitarla. Como no allí también estaba el otro pesado.
- Clarita ¿cómo estas?
- Pues ahí voy, Edu traeme una jarra de agua que esta está vacía.
Edu bajó abajo y la sonrisa que Clara tenía se le borró de golpe y se puso seria.
- ¿Qué te ha pasado? Has llorado tus ojos te delatan,cuantame.
- Clara no sé que hacer, me han llamado de una universidad de Nueva York para estudiar allí-dije como pude, Clara me abrazó-.
- Tranquila, haz lo que creas mejor.
- Pero ¿Y Fer?¿Cómo se lo digo?
- Ya no hace falta-dijo Fer por detrás con un ramo de flores y Edu tras el-.
- Fer- fui a abrazarle, pero se giró y dandole un leve empujón a Edu se largó-.
Yo no dejé de llorar en toda la tarde y Clara me ofreció quedarme a dormir.
- Venga Marti a sido culpa mía que lo he llamado, quedate, por favor-dijo Clara haciendo un pucherito-.
- No Clar, me voy a casa, siento haber estado molestando todo el día.
- Tranquila si podemos aguantar a Maya y Dani podemos soportarte-dijo Edu animandome-.
- Avisa cuando tomes una decisión.
- Esta bien, pero primero tengo que hablar con Fer.
Pasé por casa de Fer y llamé, su madre me dijo que se había ido a visitar a Maya y Dani unos días. Genial, vamos. Se había ido para escapar de la realidad, en estos casos me parecía tan inmaduro y además estos días solo hemos estado discutiendo... Bah a la mierda todo me voy a buscarlo.
Narra Fer.
Descolgué el teléfono con un hilo de voz.
- ¿Quién?-nadie respondió-.
Colgué el teléfono,después de eso ya no pude dormir y salí a dar una vuelta sin importarme nada, total ya todo me daba igual. Otra vez el puto móvil lo cogí y le grité.
- ¿Qué coño quieres? Ten el valor de decir algo, si de verdad me quisieras se te habría ido la cabeza y estarías aquí. Y hablariamos de por qué te vas-colgué-.
- Si no fueras tan gilipollas te abrías dado cuenta de que estoy detrás de tí- dijo una voz desde atrás-.
- Pues soy gilipollas al parecer-me giré y la vi ahí con los ojos hinchados de llorar-.
- Puede que me valla un año entero a Estados Unidos-dijo fingiendo una sonrisa triste-.
- Y a mi lo único que se me ocurre es venir aquí, pues si, soy gilipollas.
- Yo no sabía que estabas ahí y...-empezó a llorar-. Yo te lo iba a decir de otra forma..pero...lo siento ¿vale?
- Que tu no tienes que pedirme perdón joder, que soy yo el que no te ha dejado explicarte- grité llorando-.
- Que me abraces coño-le hice caso y la abracé acto seguido la besé-.
- Vamos a casa de nuestros caseros.
Entramos sin hacer ningún ruido y la verdad me sorprendió que todavía se escucharan ruidos. Pero poco me importó porque al poco rato nosotros estabamos igual. No me enteré ni de que se hice de día.
Narra Maya
Vaya noche que habíamos pasado, dios mío estaba muerta. Me despertó un sonido raro que venía del cuarto de Fer.
- FER ¿QUÉ HACES TU CON TU VIDA?¿MARTINA SE VA Y TU LO PRIMERO QUE HACES ES TIRARTE A OTR..?¿Martina?-dije atónita al abrir la puerta de su habitación y encontrarme allí a Martina-.
Dani se descojonaba de mi cara y Martina se acercó a la puerta roja como un tomate y la cerró, normal estaba en bragas y con el jersey descolocado y de su pelo mejor no hablar.
- Rubio no te rías- dije cruzandome de brazos por ser tan mete patas-.
- Eh que no pasa nada- me abrazó y me besó la cabeza-. Es que quería la venganza por no dejarlo dormir.
- Vamos a desayunar travieso.
- ¿No te puedo comer a besos?
- Trato hecho, pero me haces el desayuno.
- Trato.
Al poco rato aparecieron Martina y Fer vestidos decentemente y estubimos hablando.
- ¿Entonces te vas a Nueva York?
- No, nos vamos-miró a Fer-.
- Pero solo este año.
- Me alegro por vosotros ¿cuando os vais?-dijo Dani curioso-.
- Mañana.
Escupí el agua que estaba bebiendo a modo aspersor y empecé a toser.
- ¡¿Mañana?!-dijmos al unísono-.
Asintieron con la cabeza, en ese momento me di cuenta de que habíamos crecido, ya no eramos los críos que formaron su propio grupo, eramos adultos.
- Lo siento chicos pero tenemos que volver a España.
- Tan pronto, jo, si no lleváis ni un día.
- Pero nos vamos mañana.
Nos abrazamos y a mediodía se fueron, me puse súper triste le iba a añorar muchísimo, encima no los vería en todo un año,se me iba a hacer eterno. Dani y yo nos sentamos en el sofá y nos pusimos a ver una peli. En los anuncios se fue al baño y su móvil empezó a sonar, era un mensaje de una chica de la uni.
- ¿Quién es esta?-dije hablando sola-.
Leí el mensaje que me mosqueó bastante, decía:
Rubio me gustaría repetir lo de ayer, a ver cuando le das la espalda a Maya y quedamos para terminar lo del otro día ;) 
Pero será zorra y este que pensará hacer. Mejor hago como que no se nada. Volvió del baño y miró el móvil y luego me miró a mi serio.
- ¿Me has cogido el móvil?
- ¿Para qué te iba a coger yo el móvil?
- No sé puede que estés celosa.
- ¿Tendría que estarlo de alguien acaso?
- No te enfades otra vez anda.
- Tengo que estar celosa, si no no me cambiarías de tema.
- Maya venga ya no te pongas histérica.
- No estoy histérica estoy muy calmada.
Me encerré en la habitación dando un portazo. Y me tiré en la cama a llorar. Otra vez me estaba haciendo dudar de lo nuestro. Yo le quería eso es obvio, pero yo nunca sabré lo que se le pasa por la cabeza al verme porque podrá decir todo lo que quiera pero eso solo son palabras, y las palabras se las lleva el viento. La puerta se abrió lentamente.
- ¿No vas a comer nada?
No le respondí, últimamente me estaba poniendo como una osa.
- Venga un poquito-se sentó a mi lado en la cama-.
- No, ve y dale a la pija rubia francesa, no te jode.
- Cabezota que ella no me importa.
- ¿Ah no?¿Y por qué coño antes de ayer te quedaste diez minutos después de clase?
- Para hacer una cosa.
- ¡Dani que me digas la verdad, coño!
- Que es la verdad, dios odio tus putos celos.
- Encima es mi culpa.
- Mira paso de esta conversación porque paso de discutir.
- Haz lo que te salga de los huevos, total siempre lo haces.
-¿Piensas eso?
Asentí con la cabeza pero en realidad lo dudaba. Salió de la habitación bastante enfadado, yo fui al baño. Vi mi reflejo en el espejo, estaba realmente mal, tenía los ojos rojos e hinchados de llorar, el poco maquillaje que llevaba lo tenía restregado por la cara y el pelo todo alborotado. Y para colmo me veía cada vez más y más gorda. No tuve otra y me puse a vomitar, estaba hecha un asco. Dani algún día dejaría de quererme si no lo había hecho ya y se iría con la francesita, porque ¿para que va a querer a una tía celosa y gorda como yo? Escuché un ruido y salí del baño. Mi móvil sonaba, era Clara, la verdad me vino genial le conté todo lo que me pasó, bueno todo no, lo de vomitar mejor que no. Me dijo que fuera a dar una vuelta por la torre Eiffel para despejarme, le hice caso, volví a entrar al baño me lavé la cara y me vestí con una camiseta blanca de tirantes que ponía "New York" y unos shorts morados con lentejuelas. Me calcé unos taconazos de infarto y salí de esa casa. Dani no estaba allí, al principio poco me importó para que mentir pero durante mi paseo solo deseaba encontralo.
Narra Dani.
Salí de casa y Edu me llamó,oportuno el como siempre.
- ¿Se lo has dicho ya cabeza pensante?
- No además acabamos de discutir.
- Uuuuyyy malo eso eh.
- ¿SI EDU, VENGA YA?
- Eh tío la ironía dejatela en París.
- Lo siento tío es que ha visto el mensaje de la chica de la joyería que dá la casualidad de que esta en nuestra clase y se cree que había quedado con ella y joder...
- Tranquilo ya verás como todo se soluciona.
- Gracias hermano.
- ¿ Y donde andas ahora?
- Enfrente de la torre Eiffel.
- Algún día iremos a visitaros ya sabes la obsesa de mi novia con las fotos.
- Si la conozco. Bueno chao.
- Adiós picha floja.
- Eh cabrón-me colgó-. 
Seguí andando sin rumbo hasta que la encontré. Estaba sola en un banco mirando a la nada. Últimamente no comía casi nada y me sorprendió verla comiendose una hamburguesa, estuve todo el tiempo observandola. Entró en un bar y la seguí allí se dirigió al baño. Iba a entrar ya que no había nadie dentro. Me metí en el baño de al lado donde ella estaba y la escuché vomitar. Espera un momento ¿estaba vomitando? Me asomé por encima y la ví metiendose los dedos en la garganta. Esa imagen me rompió el alma en mil pedazos. Dejó de vomitar y se apoyó en la pared mirando al suelo. Estaba llorando,no tardó mucho en estar así y salió fuera se lavó la cara y salió del baño. Yo me quedé en shock. Se estaba poniendo enferma y no me había dado cuenta, ¿Pero como soy tan gilipollas? ¡Dani joder que puede tener anorexia!¡Mueve el culo! Salí corriendo del baño y la busqué con la mirada. No estaba, se había ido, busqué por los alrededores y la encontré en una zona alta desde donde se veía perfectamente la torre. Si allí sería el lugar perfecto. Mi enfado se esfumó y lo único que sentía ahora era preocupación. Preocupación por perderla...



2 comentarios:

  1. Me encanta tu novela. Yo tambien tengo una me gustaria que la leyeses y comentaras si te a guatado http://www.sentadoenelbanco.blogspot.com.es/?m=1 :)

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias cielo ahora me paso :)

    ResponderEliminar